lunes, 30 de junio de 2008

La sutileza del branded content



Interrumpir al consumidor es el principal problema con el que se enfrenta la publicidad tradicional. Por ello, surgen nuevas fórmulas que mezclan de manera sinérgica y discreta información comercial dentro de la trama de la novela, programa de televisión o película. De hecho, el cine ha sido uno de los sectores que mayor beneficio ha sabido extraer de la aplicación de este tipo de acciones.

El branded content o también llamado advertainment es una estrategia de marketing basada en aquellos contenidos que son pagados por los propios anunciantes y a través de los cuales se refleja una vinculación con el consumidor, y se difunden los valores ideales de una determinada marca. Por ello, el impacto generado es mucho mayor y eficiente.

Más allá de los métodos de la publicidad convencional e intrusiva, y el lenguaje agresivo; las acciones de branded content suelen emplearse de forma natural e insinuada para fortalecer lazos entre el producto y los consumidores, lo que ha convertido a esta disciplina en prioridad absoluta para las grandes empresas.

En 2001, BMW Films inició esta tendencia con una serie de películas de 7-10 minutos lanzadas en Internet, con los mejores directores y actores de Hollywood. Los resultados fueron impresionantes: 13 millones de visionados y 2 millones de personas registradas.

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